Este proyecto del 蜜柚直播 y La Estrella de 罢耻肠蝉贸苍 se produjo en asociaci贸n con Fronteras Desk de la estaci贸n de radio KJZZ de NPR. Escucha la serie de radio de dos partes en . El reportaje fue apoyado por el .
Est谩s en Parte 2: Las ra铆ces del problema
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GUAYMAS, Sonora 鈥 A pocos metros del porche delantero d la casa donde creci贸 Claudia Fourcade, una tuber铆a de alcantarillado expuesta, llena de l铆quido verde, emana un olor p煤trido. Los desechos escurren hacia un charco creciente en medio de la calle.
Fourcade, de 24 a帽os, sostiene un letrero escrito a mano en una cartulina naranja, suplicando: 鈥淧or favor, hagan caso por las buenas. Ya no soportamos鈥. Ella y sus vecinos organizaron una peque帽a protesta esa tarde de finales de verano, construyendo un obst谩culo de basura y escombros para llamar la atenci贸n de los trabajadores del organismo estatal de agua.
Fourcade, madre de dos ni帽os de 5 y 7 a帽os, dijo que el hedor se infiltra en su casa, lo que hace que sea imposible disfrutar de la comida. Ni siquiera puede lavar la ropa en casa, porque el olor impregna su ropa.
鈥淓s muy feo鈥, dijo. 鈥淓s muy inc贸modo vivir as铆, la verdad鈥.
Una vez trat贸 de cubrir la tuber铆a rota con cemento. Pero cuando la presi贸n de los desechos se volvi贸 demasiado grande, volvi贸 a abrirse paso, dijo.
La tuber铆a de alcantarillado expuesta de Fourcade ejemplifica un problema com煤n en Guaymas: infraestructura mal instalada.
El suelo es rocoso y dif铆cil de excavar, por lo que se instalaron muchas tuber铆as de alcantarillado demasiado cerca de la superficie, dijo Marco Antonio Ahumada Guti茅rrez, ex director regional de la Comisi贸n Estatal del Agua (CEA), en Guaymas, San Carlos, Empalme y la peque帽a comunidad yaqui de V铆cam.
鈥淣o tiene profundidad, porque es pura roca鈥, dijo Ahumada, quien tiene una licenciatura en hidr谩ulica y una maestr铆a en administraci贸n de empresas. Trabaj贸 en varios puestos de direcci贸n local para la CEA entre 1993 y 2015, incluyendo cinco a帽os como director regional entre 2009 y 2014.
Las tuber铆as deben enterrarse a una profundidad de 50 cent铆metros, sobre un lecho de arena de al menos 20 cent铆metros para amortiguarlas, dijo. En cambio, se instalaron muchas tuber铆as sobre rocas irregulares, y la presi贸n del tr谩fico a茅reo da como resultado r谩pidamente tuber铆as rotas o colapsadas, explic贸 Ahumada.
Ahumada, oriundo de Guaymas, fue uno de los cuatro exdirectores de la CEA que conversaron con el 蜜柚直播 y La Estrella de 罢耻肠蝉贸苍 sobre las causas fundamentales de la crisis del alcantarillado en Guaymas y San Carlos.
En entrevistas separadas, los ex directores de la CEA describieron los principales desaf铆os que enfrenta la entidad de servicios p煤blicos: suelo rocoso y topograf铆a monta帽osa, adem谩s de importantes problemas financieros.
Si bien los problemas de alcantarillado son comunes en todo Sonora, Guaymas enfrenta todos esos desaf铆os a la vez, dijo el ex director regional de la CEA, Iv谩n Cruz, cuyo mandato termin贸 en septiembre.
En el centro de Guaymas, un verano catastr贸fico de crisis de alcantarillado culmin贸 cuando el gobierno del estado de Sonora declar贸 una emergencia de salud a principios de noviembre.
鈥淗ay varias partes, no como el caso de Guaymas. El caso de Guaymas es m谩s complejo鈥, dijo Heriberto Aguilar, secretar铆a de Infraestructura y Desarrollo Urbano en Sonora. 鈥淵o creo que nunca se debe llegar a las urgencias. Debemos prevenir las urgencias. Cuando se llega a urgencias es que algo no hicimos bien, que algo nos fall贸鈥.
A un par de puertas de la protesta de Fourcade, Brenda L贸pez hace tortillas de harina a mano mientras su hijo de 6 a帽os, Jes煤s, juega con los vecinos. Recientemente estuvo enfermo durante 12 d铆as con diarrea y v贸mitos, que ella atribuy贸 a la exposici贸n a las aguas residuales.
El olor de la tuber铆a de alcantarillado abierta no ayuda a su negocio, dijo.
鈥溌縌ui茅n vendr铆a a comprar tortillas con esta peste?鈥, dijo. 鈥淣os hemos quejado mucho y nadie nos pone atenci贸n鈥.
Plan de tres a帽os
El nuevo director estatal de la CEA, Jos茅 Luis Jardines Moreno, y el director regional David Pintor, que supervisa Guaymas, San Carlos, Empalme y V铆cam, fueron nombrados en septiembre, luego de las elecciones locales y estatales. Ambos rechazaron una solicitud de entrevista.
En respuesta a las preguntas de este peri贸dico y de la estaci贸n de radio KJZZ, un portavoz de la oficina del gobernador proporcion贸 respuestas escritas que, seg煤n dijo, fueron compiladas por varios departamentos de la agencia.
La agencia dijo que las fallas de infraestructura hicieron necesaria la declaraci贸n de emergencia para proteger la salud de los ciudadanos.
Las tuber铆as obstruidas y las bombas de alcantarillado rotas 鈥渞epresenta un riesgo para la salud de las personas que transitan por el 谩rea y requiere la atenci贸n expedita para resolver la problem谩tica鈥, se帽ala el comunicado de la CEA. 鈥淪e tiene contemplado llevar a cabo en los pr贸ximos tres a帽os, inversiones importantes en materia de agua potable, alcantarillado y saneamiento a fin de resolver en definitiva esta situaci贸n鈥.
<&rdpStrong>La escasez de agua empeora el problema</&rdpStrong>
La escasez de agua ha agravado los problemas de alcantarillado en Guaymas y San Carlos, dijeron los ex directores regionales de la CEA Roberto Romano y Ahumada.
Las tuber铆as de alcantarillado de PVC est谩n dise帽adas para transportar un flujo constante de agua presurizada. Pero los residentes de Guaymas y San Carlos han tenido un sistema de agua racionado, en el que los hogares reciben el agua potable de la ciudad solo unos pocos d铆as a la semana. En algunos casos, la escasez de agua o las roturas de l铆nea han resultado en tramos mucho m谩s largos sin agua, dijo Romano.
En Guaymas y San Carlos, la mayor铆a de las casas tienen tanques de almacenamiento de agua en sus techos para usarla en los d铆as en que no hay flujo de agua desde la ciudad.
El flujo de agua inconsistente presiona las tuber铆as de alcantarillado, las cuales tienen que soportar periodos secos intermitentes entre periodos de flujo de agua a alta presi贸n, dijo Romano, quien fue director regional de la CEA durante 4 a帽os y medio antes de dejar el cargo en 2019.
鈥淣o est谩n dise帽ados para ese tipo de presi贸n鈥, se帽al贸. 鈥淓st谩n dise帽ados para una conducci贸n estable de agua鈥.
Otro tema es el envejecido acueducto que trae el agua a Guaymas desde Obreg贸n, a 120 kil贸metros de distancia. A los 31 a帽os est谩 llegando al final de su vida 煤til, dijo Ahumada.
Bombas rotas
Las tuber铆as no son el 煤nico problema. Las bombas de aguas residuales de la ciudad est谩n en mal estado, a menudo destru铆das o robadas para sacarles piezas, y se descomponen de forma rutinaria, lo que provoca acumulaciones de aguas residuales.
鈥淪i vas y miras una de las estaciones de bombeo, se ven abandonadas鈥, dijo Romano.
Durante gran parte del verano pasado, solo tres de la red de 11 bombas de alcantarillado de la ciudad estaban funcionando, dijo Sebasti谩n Ordu帽o, quien fue elegido este a帽o como diputado local por Guaymas-San Carlos.
鈥淟legamos a un punto donde muchas zonas de Guaymas, sobre todo las avenidas principales estuvieron inundadas en aguas negras鈥, dijo en un mensaje de texto. 鈥淟a gente ha tenido que aprender a vivir con este problema, por la indiferencia de gobiernos pasados鈥.
Los problemas de alcantarillado existen en todo Sonora, dijo Sergio 脕vila, ex director estatal de CEA. Dej贸 su cargo en septiembre, cuando se eligi贸 al nuevo gobernador. Pero en otras ciudades, las filtraciones tienden a ser menos notorias, dijo.
鈥淕uaymas tiene un problema鈥, dijo. 鈥淐ualquier cosa que fuga, todo mundo se da cuenta porque todo va hacia un punto en la ciudad鈥.
Las muestras de agua tomadas por el 蜜柚直播 el 13 de septiembre encontraron que las aguas residuales que fluyen en la Avenida Serd谩n, una de las principales v铆as de Guaymas, ten铆an niveles de coliformes fecales de 7.8 millones de partes por 100 mililitros, lo que confirma que se trata de aguas residuales sin tratar. Los coliformes fecales son el tipo de bacteria que se encuentra en los intestinos de los animales de sangre caliente y, a menudo, se utilizan como un indicadores de la contaminaci贸n fecal en el agua.
Los vendedores de alimentos al aire libre operan en el centro de la ciudad incluso cuando las calles est谩n inundadas de aguas residuales, lo que crea un peligro masivo para la salud, dijo Jaqueline Garc铆a Hern谩ndez, del Centro de Investigaci贸n en Alimentos y Desarrollo de Guaymas (CIAD).
Incluso cuando los charcos de aguas residuales se evaporan o drenan, la suciedad contaminada cubre las calles y flota en el aire, algo de lo que es imposible escapar, dijo.
Aguas pluviales
Como muchas ciudades mexicanas, Guaymas no tiene un sistema de aguas pluviales separado; toda el agua fluye hacia el sistema de alcantarillado.
Eso significa que el agua de lluvia recoge todo a su paso, incluida la arena y las abundantes pilas de basura en las calles, y la vierte en el sistema de alcantarillado ya sobrecargado.
Durante las lluvias de verano, los residentes quiz谩s bien intencionados a veces abren las tapas de las alcantarillas para permitir que se drene m谩s agua de lluvia de las calles, una boca abierta para la basura y los escombros.
Este verano, el nivel de basura en las calles fue peor de lo habitual, dicen los residentes. Durante meses, el transportador de basura contratado por la ciudad, llamado PASA, no recogi贸 la basura en absoluto. Como dicen los residentes de Guaymas, 鈥淧ASA no pasa鈥.
Los medios locales informaron que las disputas contractuales y un brote de COVID-19 en PASA fueron los responsables, lo que deja a los residentes de Guaymas no solo inundados de aguas residuales, sino tambi茅n rodeados de monta帽as de basura, y ello conlleva sus propios riesgos para la salud.
Cualquier estudio sobre los impactos en la salud de las aguas residuales en Guaymas se ver铆a confundido por el riesgo para la salud simult谩neo que representa la basura en descomposici贸n en las calles, dijo Jos茅 Arreola, director del Centro de Investigaciones Biol贸gicas del Noroeste (CIBNOR).
鈥淟a recolecci贸n de la basura en la ciudad es muy deficiente y representa un grave problema por sus efectos adversos en la salud publica, incluyendo tambi茅n riesgos de enfermedades respiratorias y gastrointestinales鈥, se帽al贸.
La contaminaci贸n extendida
Entre agosto y noviembre, este peri贸dico tom贸 muestras de agua de bah铆as, arroyos y calles de Guaymas, as铆 como muestras del sistema de tratamiento de aguas residuales naturales en San Carlos, denominado laguna de oxidaci贸n. Las lagunas son el 煤nico tratamiento de aguas residuales disponible en San Carlos o Guaymas.
Las pruebas de agua realizadas por el CIAD Guaymas, midieron la presencia de coliformes fecales.
Los resultados de las pruebas revelaron contaminaci贸n de aguas residuales en una bah铆a de Guaymas en violaci贸n de los est谩ndares ambientales federales y confirmaron que las aguas residuales que fluyen por el centro de Guaymas eran aguas residuales sin tratar.
Las pruebas del Star tambi茅n revelaron que la laguna de oxidaci贸n en San Carlos no es consistentemente efectiva para purificar los desechos humanos que se bombean all铆.
Laguna de oxidaci贸n, el paso m铆nimo
El desarrollo en San Carlos est谩 aumentando sin el apoyo correspondiente para el sistema de alcantarillado envejecido o ning煤n plan concreto para una instalaci贸n moderna de tratamiento de aguas residuales, dicen los l铆deres locales.
Al igual que Guaymas, el sistema de tratamiento de aguas residuales de San Carlos tambi茅n depende 煤nicamente de una laguna de oxidaci贸n administrada por la CEA, con la excepci贸n de las casas qu cuentan con sistemas s茅pticos y algunos negocios privados que han construido sus propias lagunas de oxidaci贸n en las afueras de la ciudad. El Country Club tambi茅n tiene su propia laguna de oxidaci贸n con un solo estanque.
Se supone que el m茅todo de tratamiento natural de aguas residuales utiliza una combinaci贸n de luz solar, ox铆geno y bacterias para limpiar las aguas residuales.
Pero en EE.UU. se usa solo como tratamiento secundario o terciario, despu茅s de que las aguas residuales ya hayan pasado por una planta de tratamiento de agua convencional, dijo David Walker, cient铆fico investigador del Departamento de Ciencias Ambientales de la Universidad de 蜜柚直播.
Si bien es mejor que nada, 鈥渓os estanques de oxidaci贸n nunca debieron ser la 煤nica fuente de tratamiento en ning煤n lugar. Un estanque de oxidaci贸n es literalmente lo m铆nimo que se puede hacer鈥, dijo Walker. Y en M茅xico 鈥渘o hay mucha fuerza en las regulaciones que les impida hacer eso鈥.
Muchos pueblos y ciudades mexicanos de escasos recursos dependen 煤nicamente de las lagunas de oxidaci贸n, y se las arreglan con un tratamiento inadecuado de las aguas residuales, dijo Alejandro Olivera, cient铆fico principal y representante en M茅xico del Centro para la Diversidad Biol贸gica con sede en 罢耻肠蝉贸苍.
鈥淓s habitual, pero no es bueno鈥, dijo Olivera, quien vive en La Paz, Baja California.
Incluso las lagunas de oxidaci贸n que logran reducir los niveles de contaminaci贸n fecal no abordan otros contaminantes, como metales pesados y productos qu铆micos como nitr贸geno y f贸sforo.
E incluso si una laguna tiene una tasa de eliminaci贸n del 90% o m谩s de bacterias coliformes fecales, esa cifra suena m谩s impresionante de lo que es, dijo Walker.
鈥淪i est谩 comenzando a haber un nivel enorme (de coliformes fecales), como el que se encuentra en las aguas residuales sin tratar, realmente no es dif铆cil mostrar una alta tasa de eficiencia de eliminaci贸n鈥, dijo. 鈥淓sto no significa que el efluente sea seguro de ninguna manera, porque ese 10% residual (nivel de coliformes fecales) a煤n podr铆a ser mucho m谩s alto de lo que se considerar铆a seguro para su liberaci贸n al medio ambiente鈥.
En San Carlos, la laguna de oxidaci贸n tiene tres estanques. El primero contiene aguas residuales sin tratar, bombeadas desde todos los rincones de la ciudad. En el primer estanque, los s贸lidos y los sedimentos se hunden hasta el fondo del estanque. El l铆quido fluye hacia el segundo estanque, donde la exposici贸n a la luz solar, el ox铆geno y las bacterias corroe los pat贸genos peligrosos de los desechos. En el tercer estanque, se supone que el agua cumple con el est谩ndar ambiental federal para uso agr铆cola: un promedio diario de 2,000 partes de coliformes fecales por 100 mililitros.
Pero las pruebas de calidad del agua realizadas por el Star muestran que la laguna de oxidaci贸n de San Carlos es inconsistente, con una efectividad que var铆a dram谩ticamente seg煤n el volumen de desechos que fluyen hacia las lagunas.
En el ajetreado mes tur铆stico de agosto, la laguna de oxidaci贸n se desbordaba hacia un prado adyacente, con las aguas residuales de la laguna llenando los pastos, atrayendo caballos salvajes que beben ah铆.
Las muestras de agua tomadas el 16 de agosto del estanque 鈥渓impio鈥 final ten铆an coliformes fecales que suman 78,000 partes por 100 mililitros, seg煤n el an谩lisis realizado por el CIAD Guaymas.
Eso es casi 40 veces el umbral diario seg煤n las normas ambientales federales de M茅xico. En el transcurso de un mes, los niveles de coliformes fecales deben promediar menos de 1,000 partes por 100 mililitros para cumplir con los est谩ndares.
Pero las pruebas de calidad del agua mejoraron dr谩sticamente seis semanas despu茅s, cuando la laguna no se desbordaba hacia el prado:
Un segundo conjunto de muestras de agua, tomadas del estanque 鈥渓impio鈥 de la laguna de oxidaci贸n el 27 de septiembre, dieron buenos resultados dentro de los est谩ndares federales: 450 partes de coliformes fecales por 100 mililitros.
Las muestras tomadas y analizadas el 3 de noviembre, cuando el nivel del agua de la laguna era notablemente m谩s bajo que las pruebas anteriores, mostraron niveles de coliformes fecales de solo 15 partes por 100 mililitros.
Los resultados sugieren que el volumen de aguas residuales, generado a fines de septiembre y noviembre, fue menor que en los ajetreados meses de verano, lo que permiti贸 que la laguna de oxidaci贸n hiciera su trabajo de manera efectiva, dijo Garc铆a Hern谩ndez.
Pero tambi茅n sugiere que la laguna de oxidaci贸n se volver谩 cada vez m谩s ineficaz a medida que crezca la poblaci贸n de San Carlos.
<&rdpStrong>Enfermarse jugando golf</&rdpStrong>
A pesar de la inconsistencia de la laguna de oxidaci贸n de San Carlos, las aguas residuales 鈥渢ratadas鈥 todav铆a se utilizan para regar el campo de golf en el San Carlos Country Club.
El ex director regional de la CEA y nativo de Guaymas, Roberto Romano, dijo que durante su mandato en 2016 viv铆a en el Country Club cuando los residentes comenzaron a quejarse de los olores de las aguas residuales.
鈥淢ucha gente se fue del campo de golf de San Carlos por el olor鈥, dijo. 鈥淪e estaban enfermando鈥.
Ese a帽o, Romano obtuvo fondos estatales para limpiar la laguna de oxidaci贸n de San Carlos; se drag贸 el fondo para profundizar la laguna y se cort贸 la vegetaci贸n descuidada. Ese modesto esfuerzo mejor贸 en gran medida el desempe帽o de la laguna y elimin贸 el olor en el campo de golf, dijo.
Si ese tipo de mantenimiento se hiciera anualmente, la laguna podr铆a mantenerse en buenas condiciones de funcionamiento, dijo.
鈥淪e necesitar铆a menos de 1 mill贸n de pesos (alrededor de $46,000 d贸lares) cada a帽o para mantener la laguna de oxidaci贸n鈥, dijo Romano. 鈥淣o es agua potable, pero puede ser el agua perfecta para el riego, si se mantiene鈥.
El propietario de San Carlos Golf Club, Lenny Manzon, rechaz贸 una solicitud para ser entrevistado sobre la calidad actual del agua de riego en el campo de golf.
鈥淪upuestamente, son aguas grises, no aguas negras鈥, dijo cuando se acerc贸 al campo de golf. Dirigi贸 cualquier pregunta adicional a la CEA.
Problemas de dinero
Si bien la CEA a nivel estatal opera los sistemas de agua y alcantarillado en Guaymas, San Carlos, Empalme y V铆cam, esas entidades locales de la CEA son auditadas por separado, y sus resultados financieros est谩n a millas de distancia.
La CEA en San Carlos, con tarifas de agua m谩s altas y un alto porcentaje de usuarios que pagan sus facturas de agua, est谩 operando en n煤meros negros, seg煤n una auditor铆a de 2020.
Pero la CEA en Guaymas tiene problemas econ贸micos, dicen ex directores. El a帽o pasado, la CEA Guaymas registr贸 una p茅rdida de $29 millones de pesos ($1.3 millones de d贸lares), seg煤n una auditor铆a financiera de la CEA Guaymas de 2020. En 2019, la p茅rdida fue de $23 millones de pesos ($1 mill贸n de d贸lares).
Las unidades de la CEA en Guaymas, San Carlos, Empalme y V铆cam han acumulado una deuda total cercana a los $325.2 millones de pesos, unos $15 millones de d贸lares, por facturas de agua no pagadas.
Los problemas financieros en la CEA Guaymas tienen algunas causas principales, seg煤n ex directores de la CEA:
El 40% del producto primario de la CEA, el agua potable que se transporta desde Obreg贸n (a unos 120 kil贸metros de Guaymas), se pierde en gran parte por fugas en las tuber铆as. Se espera alg煤n nivel de p茅rdida; en Estados Unidos, alrededor del 15% del agua potable se pierde por evaporaci贸n y procesos naturales, dijo Ahumada. Pero una p茅rdida del 40% es un desperdicio insostenible de un recurso escaso, dijo.
Demasiados usuarios en Guaymas no pagan sus facturas de agua y las tarifas del agua son demasiado bajas en comparaci贸n con el costo de producir y transportar el agua, dijo el ex director estatal de la CEA, Sergio 脕vila, en una entrevista. Durante la pandemia, solo el 19% de los usuarios de Guaymas han pagado su recibo de agua, en comparaci贸n con el 60% anterior a la pandemia, dijo Cruz. Las tasas de pago en San Carlos est谩n m谩s cerca del 90%, incluso en la pandemia, dijo.
La CEA debe negociar con dos poderosos sindicatos de trabajadores que han hecho demandas agresivas, lo que ha llevado a una fuerza laboral ineficiente y sobredimensionada, dijeron ex directores. Ahumada dijo que la CEA en Guaymas, San Carlos, Empalme y V铆cam podr铆a operar eficientemente con la mitad de trabajadores, es decir, 170 de los 350 actuales.
Poder sindical
Tres directores regionales de la CEA se帽alan a los dos sindicatos que representan a los trabajadores de la CEA como parcialmente responsables de los problemas financieros de la CEA Guaymas y las demoras en las reparaciones urgentes.
La CEA Guaymas tiene dos sindicatos: uno que representa a los trabajadores de primera l铆nea y otro para ingenieros y t茅cnicos de alto nivel, dijo Romano.
El 70% del gasto de la CEA Guaymas se destina a la n贸mina y las bonificaciones de los trabajadores, dijo Romano.
Romano describi贸 situaciones en las que un problema el茅ctrico apaga una bomba de aguas residuales durante el fin de semana. Seg煤n los acuerdos sindicales, solo un trabajador de un sindicato en particular puede activar el interruptor para volver a encender la bomba, lo que lleva a retrasos innecesarios en la interrupci贸n del flujo de aguas residuales, dijo.
Romano se帽al贸 que en sus cuatro a帽os y medio como director regional de la CEA hubo seis huelgas laborales.
鈥淚mag铆nese la energ铆a, el tiempo que exige al administrador鈥, dijo. 鈥淓s muy agotador鈥.
Pero los trabajadores de la CEA dicen que sin los sindicatos, ni siquiera tendr铆an uniformes o calzado protector.
Antonio Chavoya, residente de Guaymas, dej贸 la CEA en el 2020 despu茅s de 29 a帽os trabajando ah铆, frustrado por no tener las herramientas para hacer el trabajo, como veh铆culos que funcionen, con buenas llantas y gasolina. Ahora trabaja en seguridad en el supermercado Ley.
El sindicato asegur贸 鈥渓os aumentos salariales, aguinaldos, botiquines, botas impermeables鈥, dijo. 鈥淭odo eso nos consigue el sindicato鈥.
La falta de pago por parte de los usuarios es otro tema complejo.
鈥淪e supone que la empresa de agua es aut贸noma y autosuficiente. Pero no lo es鈥, dijo Romano, el ex director regional de la CEA. 鈥溌縋or qu茅? Porque la gente no paga por el agua鈥.
Muchos en Guaymas no pagan porque el servicio de agua potable y alcantarillado es deficiente, se帽al贸. Pero sin esos ingresos, hay pocas posibilidades de que la CEA tenga los recursos para mejorar el servicio, dijo. 鈥淓s un c铆rculo vicioso鈥.
Adem谩s de los ingresos por tarifas de usuario, la CEA Guaymas obtiene un subsidio estatal para ayudar a cubrir sus gastos, principalmente n贸mina y costos de energ铆a, seg煤n un comunicado de la actual administraci贸n de la CEA en Hermosillo. Este a帽o, ese subsidio rondar谩 los $83 millones de pesos (uno $3.8 millones de d贸lares). Pero no es suficiente para cubrir el mantenimiento necesario y otros gastos, dice el comunicado.
Los usuarios tambi茅n tienen dudas sobre si su dinero se destina a mejorar el servicio o si est谩 siendo mal administrado por funcionarios p煤blicos corruptos, dijo Ordu帽o, el diputado local por Guaymas.
鈥淟a principal acci贸n debe ser recuperar la confianza de los ciudadanos, convencerlos de que ya no habr谩 m谩s corrupci贸n, que su pago ser谩 destinado a mejorar el servicio de agua y alcantarillado鈥, dijo. 鈥淟ogrando esto habr谩 un flujo de capital con el cual mantener los equipos de rebombeo en buenas condiciones鈥.
Gasto de energ铆a
La topograf铆a de Guaymas es monta帽osa, lo que requiere una costosa red de bombas de alcantarillado para llevar las aguas residuales de los residentes a trav茅s de colinas empinadas al 煤nico sistema de tratamiento de aguas residuales de la ciudad, una laguna de oxidaci贸n conocida como 鈥淟a Salada鈥.
La laguna, que incluso los l铆deres de la CEA ahora admiten que es inadecuada, es el 煤nico tratamiento que reciben las aguas residuales antes de que se viertan al mar.
El ex director regional de la CEA, Ahumada, se帽al贸 los enormes costos de energ铆a necesaria para operar las bombas de aguas residuales. Cada mes, Guaymas gasta $5.5 millones de pesos (aproximadamente $252,000 dls.), casi la mitad de sus ingresos mensuales por pagos de usuarios, en gastos de energ铆a para atender a sus 60,000 usuarios, dijo.
Compare eso con los $6 millones de pesos gastados en la ciudad de Obreg贸n, que tiene 230,000 usuarios dom茅sticos pero un terreno mucho m谩s plano, agreg贸 Ahumada.
鈥淓stamos hablando de una cuarta parte de los usuarios, pero casi los mismos costos de energ铆a鈥, se帽al贸.
Con la planificaci贸n, el gasto de energ铆a podr铆a reducirse, dijo Ahumada. La red de bombas de aguas residuales de Guaymas debe trabajar duro para mover las aguas residuales por colinas empinadas; gran parte de esas aguas residuales del extremo norte densamente poblado de Guaymas viaja seis millas monta帽osas para llegar a la laguna de oxidaci贸n en el lado sur de la ciudad.
Una planta de tratamiento de aguas residuales en el lado norte e, idealmente, dos plantas adicionales en otras 谩reas de la ciudad, reducir铆an significativamente los gastos de energ铆a de la ciudad, dijo Ahumada. Tambi茅n reducir铆an el volumen de aguas residuales que fluyen hacia la laguna de oxidaci贸n sobrecargada en el sur de Guaymas, dijo.
Reportar es in煤til, dicen algunos
En respuesta a una solicitud de registro p煤blico, la CEA comparti贸 una base de datos de informes de fugas de aguas residuales recibidos en Guaymas durante los 煤ltimos cuatro a帽os. La base de datos muestra un aumento constante de 1,024 informes en 2017 a 1,474 informes en los primeros ocho meses de 2021, adem谩s de una ca铆da a 829 durante el a帽o inusualmente seco de 2020.
Esas cifras seguramente subestiman la magnitud del problema, dicen los residentes locales.
Muchos ya no presentan denuncias oficiales a la CEA. Algunos llaman a amigos que trabajan en la CEA o se acercan a los trabajadores de la CEA en la calle para pedir ayuda.
Otros se han rendido por completo. Asomado a la puerta de su casa en el barrio El Rastro en el centro de Guaymas, H茅ctor Montoya describe una situaci贸n de alcantarillado 鈥渋nsoportable鈥 frente a su puerta.
Como muchos otros, ya no hace reportes a la CEA.
鈥淎 veces lo arreglan, pero simplemente regresa鈥, dijo.
Si bien la inundaci贸n de aguas residuales ha sido peor este verano, que obtuvo un nivel saludable de lluvia en comparaci贸n con el verano seco de 2020, Montoya dice que las aguas residuales han sido un problema durante los 15 a帽os que ha vivido ah铆.
鈥淭odo fluye hacia el mar鈥, dijo. 鈥淣o est谩 bien, pero 驴qu茅 puedes hacer?鈥.
<&rdpStrong>Nos revuelve el est贸mago</&rdpStrong>
El chorro de aguas residuales junto a la casa de Montoya se origina en una tapa de alcantarilla en el callej贸n junto a su casa. Alguien ha colocado una serie de bloques de hormig贸n como pelda帽os para que los peatones los usen al cruzar el arroyo.
Despu茅s de cruzar la carretera principal, el flujo de aguas residuales finalmente se une a un arroyo de concreto con aguas residuales de otras alcantarillas desbordadas en el vecindario.
El arroyo contin煤a hacia el mar, pasa un aro de baloncesto solitario y fluye paralelo a un gran cementerio antes de cruzar bajo un paso elevado muy transitado.
En esta coyuntura, las aguas residuales pasan por una tienda Six, donde M贸nica Castro trabaja largas horas en medio del olor nauseabundo.
A fines de agosto, Castro no solo padec铆a las aguas residuales del arroyo. Justo calle arriba, otro arroyo se estuvo derramando de una tapa de alcantarilla durante dos meses, encharcando la calle frente a su lugar de trabajo. Su tienda ahora est谩 llena de moscas y, a veces, no come en todo el d铆a debido al olor, dijo.
鈥淐uando hace mucho calor, lo que es la apeste, se impregna dentro de la tienda y nos revuelve el est贸mago鈥, dijo. 鈥淣os da asco. El muchacho que me ayuda en la tarde lleg贸 y lleg贸 vomitando porque no aguantaba el olor鈥.
Los trabajadores de la CEA ven铆an una vez cada dos meses, pero lo que hac铆an no hizo ninguna diferencia: el rastro de aguas residuales frente a su tienda todav铆a fluye, dijo.
Pero Castro no culpa solo a la CEA. Tambi茅n culpa a los residentes que arrojan su basura a la calle, obstruyendo la infraestructura.
鈥淓s una emergencia de salud, por supuesto鈥, dijo.
El Star analiz贸 muestras del arroyo lleno de desechos que flu铆a hacia la bah铆a y confirm贸 que se trataba de aguas residuales sin tratar, con 14 millones de partes de coliformes fecales por 100 mililitros.
El Star tambi茅n tom贸 muestras de agua a lo largo de la costa de la bah铆a a la que flu铆an las aguas residuales. Los resultados mostraron m谩s de 240,000 partes de coliformes fecales por 100 mililitros. Eso es m谩s de 100 veces el est谩ndar federal para descargas de aguas residuales en aguas nacionales.
鈥淎y, Dios m铆o, eso es muy alto鈥, dijo Elsa Coria, una veterinaria que dirige el Centro de Rescate, Rehabilitaci贸n e Investigaci贸n de Fauna Silvestre (CRRIFS), en San Carlos. Coria vive en el barrio San Bernardo, ubicado cerca de la bah铆a contaminada.
Se necesita m谩s investigaci贸n sobre el impacto de las aguas residuales en la vida marina, pero en el sur de M茅xico, se ha demostrado que los contaminantes fecales da帽an los arrecifes de coral, subray贸.
Se ha demostrado que otros contaminantes, como metales pesados e insecticidas, causan tumores en las tortugas marinas, como las que son rescatadas y libera al mar cada a帽o, dijo. Se sabe poco sobre el impacto de las aguas residuales, dijo.
Coria desea que m谩s personas recuerden cu谩n interconectada est谩 la salud humana con la de los animales en su entorno.
鈥淪omos parte de una red. No estamos separados del medioambiente鈥, coment贸. 鈥淭odo lo que le hacemos al medioambiente nos est谩 alcanzando鈥.
Contacta a la reportera Emily Bregel en emily.bregel@gmail.com o en Twitter: @EmilyBregel. Kendal Blust, reportera de Fronteras Desk de la radio KJZZ en Hermosillo, contribuyó a la investigación para este reportaje.